Sergio Romero ocupó el arco del seleccionado argentino en reiteradas ocasiones, pero desde la llegada de Jorge Sampaoli como entrenador dejó ese lugar. La escasa actividad en Manchester United no lo ayudó y una lesión lo dejó afuera del Mundial de Rusia 2018. Con Lionel Scaloni recibió la citación solo para dos amistosos en los que fue titular. Hoy, ya como jugador libre, pretende volver.

"Chiquito" tuvo un mano a mano con una leyenda en su supuesto como Ubaldo Matildo Fillol, quien lo descubrió en las divisiones juveniles de Racing, a través de Instagram. Alli expresó sus deseos de selección y habló del futuro de su carrera.

"Sigo jugando al fútbol por el sueño de volver a la selección. Es un orgullo vestir la camisetade nuestro país. Te marca a fuego. Estar parado en fila para escuchar el himno es todo; vas por tu patria", indicó.

"Yo espero volver y que el arco de la Selección me espere para mi regreso", apuntó el exRacing Club.

Romero tiene récord de presencias en el arco del seleccionado argentino con 96 partidos y sueña con una nueva chance. Para ello necesitará un nuevo club y regularidad: "tengo varios ofrecimientos desde Europa, Inglaterra e Italia. También de España y si es de ahí será una experiencia nueva".

A su vez, Romero aprovechó para hablar de los supuestos intereses de Boca y Racing por repatriarlo al fútbol argentino.

"El acercamiento de Boca fue cuando el Guillermo Barros Schelotto era el entrenador, que me llamó y habló conmigo. Después lo que hablaron en este periodo es todo mentira y no hubo acercamiento. Conozco Román (Riquelme), lo quiero mucho, pero no hubo nada para jugar en Boca", dijo Romero.

El exSampdoria de Italia aseguró que no tuvo contactos con la dirigencia de Racing y que la última vez fue con Diego Milito como manager deportivo. "en Racing me dicen que esa es mi casa y yo lo sé, pero la única vez que se acercaron del club fue con Diego Milito de manager".

"Desde hace un año atrás que nadie me habla para ir a Racing. Ninguna persona me dijo te queremos o te ofrecemos esto. Las veces que escuché a Blanco hablar es lo que sale de su boca, pero nunca por teléfono o en la cara", señaló Romero.