Rosario Central venció 1-0 a Independiente en el Gigante de Arroyito y le asestó un golpe más, para caer un círculo más abajo en el infierno del Dante.

Tras la renuncia de su ahora ex presidente Fabián Doman, el Rojo no pudo con un Canalla que fue superior en el primer tiempo, y que en el complemento jugó a media máquina, mientras que Independiente fue a buscar el empate pero no pudo conseguirlo aunque tuvo chances.

A los 23 minutos, y tras una poco feliz salida, Independiente cometió un error no forzado, Jaminton Campaz la recuperó, y en pared con Ignacio Malcorra, definió cruzado a la red y puso el 1-0.

Con el paso de los minutos el local se asentó, Malcorra y Campaz tuvieron dos chances, pero no terminaron en grito, ante las buenas performances  del arquero Rodrigo Rey.

En el complemento el Rojo siguió sin hilvanar, salvo errores, que pudieron convertirse en goles de Central pero la impericia del local no lo materializó.

Independiente tuvo la chance más clara en un centro de Cuero que Broun no llegó a cortar, Vallejo cabeceó bajo el arco y la pelota pegó en el palo.

Sobre el cierre, a los 39, Broun tapó lo que hubiera sido el empate, ante Matías Giménez. Tras una serie de rebotes, Komar salvó la caída de la valla local.

El Rojo llegó al empate tras un centro en el que Barreto se la bajó a Cauteruccio, quien mandó la pelota a la red tras un rebote. Sin embargo el gol fue anulado por posición adelantada a instancias del VAR.

El partido quedó en manos de los de Miguel Russo, quienes en la próxima fecha visitarán a Atlético Tucumán. El Rojo, en un infierno que no tiene nada de encantador, recibirá nada menos que a Racing Club, quien también llegará tras una penosa caída como local ante Newell's. El clásico se jugará el domingo desde las 16.30 en el Estadio Libertadores de América-Ricardo Enrique Bochini.