Los días previos al clásico de Brasil-Argentina no fueron sencillos. Una disposición de la agencia brasileña Anvisa intentó deportar a cuatro jugadores: Emiliano Martínez, Emiliano Buendía, Giovani Lo Ceslo y Cristian Romero, quienes militan en la Premier League. El sábado hubo una reunión de tres horas y el problema pareció resuelto. Anvisa persistió con su disposición y el micro de la delegación argentina estuvo a punto de no salir del hotel. Llegaron al estadio, empezaron el partido y a los cuatro minutos, integrantes de Anvisa interrumpieron el partido ante la incredulidad de todos.

Fue la gota que rebasó el vaso. Argentina tomó la decisión de retirarse del estadio. Lionel Messi y Lionel Scaloni saludaron a Tite y Neymar, explicaron su postura, y a otra cosa.

"Hijos de puta", insultaron los hinchas brasileños en defensa de los jugadores argentinos, que fueron notificados en el lugar de la medida dispuesta sobre los cuatro futbolistas que actúan en el Reino Unido: Damián Martínez, Cristian Romero, Giovani Lo Celso y Emiliano Buendía.

Los cuatro jugadores fueron denunciados por el incumplimiento de la norma para el ingreso a suelo brasileño, prevista en la Ordenanza Interministerial No. 655, de 2021, que establece que los viajeros extranjeros que hayan pasado por Reino Unido, Sudáfrica, Irlanda del Norte e India en los últimos 14 días no pueden entrar a Brasil.

"Los cuatro jugadores deben ser deportados de Brasil por violar la ley brasileña", afirmó hoy el presidente de Anvisa, el contralmirante Antonio Barra Torres, al defender el operativo que suspendió el partido entre Brasil y Argentina en San Pablo por las Eliminatorias Sudamericanas.

El funcionario del gobierno de Jair Bolsonaro dijo que desconoce la ley deportiva y que personas que vienen del Reino Unido tienen que tener una cuarentena en Brasil, como es el caso de Emiliano Martínez, Emiliano Buendía, Giovani Lo Celso y Cristian Romero, que están siendo procesados por violar la ley sanitaria.

Brasil es el segundo país en muertos, con más de 581.000 detrás de Estados Unidos, por la pandemia de coronavirus.

El partido correspondiente al postergado de la sexta fecha de las Eliminatorias Sudamericanas quedó envuelto en un papelón, suspendido por las autoridades sanitarias que informaron a esos cuatro jugadores para cumplir con una cuaretena obligatoria, a pesar del acuerdo entre Conmebol, AFA y CBF.

Hasta el momento, la AFA no emitió comunicación oficial a la espera de los pasos a seguir por el seleccionado argentino.