"Se podría haber ganado, pero ellos se metieron atrás en el segundo tiempo y contraatacaban, que es lo que más cómodo sentían. Este resultado no nos sirvió, así que ahora hay que ganar para clasificar”, remarcó el arquero de Boca y sostuvo que "ahora dependemos más que nunca de nosotros".

El futbolista volvió a defender el arco xeneize luego de estar aislado diez días en Ecuador por dar positivo de coronavirus y resaltó "el sacrificio del plantel que está tratando de seguir en la Copa y ahora va a jugar ante Racing el próximo domingo por una de las semifinales de la Liga Profesional. El grupo se rompe el lomo para mejorar. Estamos en semifinales de la Copa de La Liga y muy cerca de pasar de ronda en la Libertadores. El balance hasta ahora es positivo".

En el mismo sentido se expreso Mariano Herrón, el ayudante de campo del suspendido Miguel Angel Russo, dijo en conferencia de prensa que "los partidos que se presentan con equipos que se meten atrás, nos cuestan mucho, falta abrir el marcador para abrir el partido y eso es lo que más nos conviene. Sabemos que tenemos jugadores desequilibrantes. Nos falta un poco de juego e intentaremos solucionar ese problema. Entendíamos que se nos iba a presentar el partido como se dio. Buscamos más en el segundo tiempo que en la primera parte".

"En gran parte del partido metimos a Barcelona en su campo. Fallamos en la gestación para que nuestros delanteros tengan más facilidades en el área. Tenemos un plantel de más de 20 jugadores y confiamos en todos ellos. No podemos depender solo de once jugadores, la decisión fue cambiar y poner gente más fresca y darle la misma importancia", cerró Herrón.

Boca vuelve a los entrenamientos este viernes desde las 10 en el predio de Ezeiza para prepararse para jugar ante Racing en el estadio Bicentenario de San Juan, el próximo domingo desde las 15.30, por una de las semifinales de la Copa de la Liga Profesional, con el arbitraje de Darío Herrera.